Otro de los fenómenos que adorábamos de los 80 es Los Inmortales [1]; una excelente ídea que combina flashbacks de época con duelos a espadazo limpio y personajes que cuentan sus edades por siglos- más tarde el género vampírico se revitalizaría quizás con la estupenda Entrevista con el Vampiro [2] del 94 (nótese que el libro Entrevista con el Vampiro [3] se escribió en 1973) (quizás los chupasangres estaban en boga antes, pero yo la memoria histórica la tengo harto olvidada), pero unos cuantos ya lo flipábamos de críos con las aventuras de Connor MacLeod [4] (maclau), Juan Sánchez Villa-Lobos Ramírez [5] y el inolvidable Kurgan [6].
Pese a que la premisa daba para rato y se prestaba a ser franquicia de las buenas, las secuelas cinematográficas fueron horribles (para los que opinan que existen). Más tarde vendría un aceptable culebrón televisivo [7] que, como mínimo, hacía que la idea no estuviera olvidada en un rincón. Al parecer, también ha habido un spin-off [8] de la serie, unos dibujos animados [9] (que al parecer, tampoco existen) e incluso una cuarta secuela [10] basada en la serie (que servidor vio en un cine sorprendentemente lleno sentado al lado de unas adorables pero perdidas abuelitas).
Pero bueno. Ahora parece que están en producción un anime [11] (con robots gigantes- me temo que su existencia también sera negada) y otra secuela [12]; seguramente la saga también es difícil de matar.
[5] Juan Sánchez Villa-Lobos Ramírez
[7] un aceptable culebrón televisivo
A todo esto, esta parrafada viene a que, al parecer, los amables productores de la serie la han puesto en Google Video [13] para ayudarnos a pasar el rato. Si bien en ocasiones puede hacernos desear que haya una mejor palabra en nuestro idioma para decir cringe [14], con la debida actitud puede resultar entretenida (aunque a mi me da un poco de pánico revisarla).